El 8 de marzo se conmemora el Día internacional de la mujer trabajadora, en recuerdo de una matanza que fue parte de las luchas obreras y también de las luchas feministas, que en ese caso confluyeron para dejar 140 jóvenes trabajadoras textiles muertas en los Estados Unidos. Este año, el tema del Día Internacional de la Mujer (8 de marzo), “Mujeres líderes: Por un futuro igualitario en el mundo de la Covid-19”, celebra los enormes esfuerzos realizados por mujeres y niñas de todo el mundo a la hora de definir un futuro más igualitario y la recuperación ante la pandemia de Covid-19, y resalta las deficiencias que persisten.
Un 8 de marzo, mujeres obreras murieron en el incendio provocado por las bombas incendiarias con que intentaban desalojarlas de una fábrica textil que mantenían tomada en Nueva Jersey, junto a Nueva York en los Estados Unidos de Norteamérica.
Los Estados Unidos, desde antes de su independencia de Inglaterra, tenían plantaciones de algodón con esclavos en el Sur, debido a que como hoy es la industria electrónica, entonces el sector más dinámico de la economía era el textil, con centro fabril en las ciudades inglesas, donde se elaboraba materia prima de todo el mundo.
Por esa razón, en un país con gran extensión pero poca oferta de mano de obra, las mujeres comenzaron a trabajar en las fábricas textiles y a reclamar derechos similares a los que exigían los varones, que derivaron en tragedias como el asesinato judicial de los anarquistas Sacco y Vanzetti y tantos otros.
Similares condiciones provocaron por la misma época la “semana trágica” en los talleres Vasena en Buenos Aires y las matanzas de la Patagonia y de la empresa inglesa La Forestal en el Chaco y en Santa Fe.
Las mujeres trabajaban en su gran mayoría de la industria textil, debido a su especial adecuación al trabajo, a las mayores posibilidades de explotación vinculadas a la ideología patriarcal que el propio capitalismo contribuiría a socavar luego pero que entonces usaba sin problemas.
Era una época en la que cada vez más mujeres se incorporaban a la producción, especialmente en la rama textil, donde eran mayoría absoluta. Pero las extenuantes jornadas de más de 12 horas a cambio de salarios miserables sublevaron a las obreras de una fábrica textil neoyorquina que salieron a reclamar por sus derechos. Era el 8 de marzo de 1857 y las manifestantes fueron atacadas por la policía.
Medio siglo más tarde, en marzo de 1908, 15.000 obreras marcharon por Nueva York al grito de “¡Pan y rosas!”, sintetizando en esta consigna sus demandas por aumento de salario y por mejores condiciones de vida. Y, al año siguiente – también en marzo -, 140 mujeres jóvenes murieron calcinadas en la fábrica textil donde trabajaban encerradas en condiciones inhumanas.
En 1910, en un congreso internacional de mujeres socialistas, la alemana Clara Zetkin propuso que el 8 de marzo como el día Internacional de la Mujer, en homenaje a aquellas que llevaron adelante las primeras acciones de mujeres trabajadoras organizadas contra la explotación capitalista.
Siete años más tarde, cuando se conmemoraba este día en Rusia en febrero de 1917 para el calendario juliano todavía en uso por la iglesia ortodoxa, las obreras textiles tomaron las calles reclamando “Pan, paz y libertad”. Marcaron así el inicio de la revolución bolchevique.
El día de la Mujer ha ido perdiendo carácter obrero reivindicativo y se viene convirtiendo al calor del impulso del feminismo en una jornada de lucha en la que se reclaman los derechos de todas las mujeres.
El día Internacional de la Mujer está reconocido por la Organización de las Naciones Unidas (ONU). La celebración recoge una lucha ya emprendida en la antigua Grecia por Lisístrata, quien empezó una huelga sexual contra los hombres para poner fin a la desastrosa guerra con Esparta.
En una comedia de Aristófanes, Lisístrata (la que disuelve los ejércitos), enérgica matrona ateniense, hace jurar sobre copas de vino a las otras mujeres que no tendrán trato conyugal con sus maridos mientras no se firme la paz, considerando el poco juicio que mostraban los hombres de entonces. Una traducción dice: Nuestros hombres han hecho de la guerra/ juego de obstinación, que nos destierra/ a larga deserción, placer fugaz//. Desde hoy el sexo se armará de escudo/y el idioma de amor quedará mudo /hasta el regreso manso de la paz.
La iniciativa de Lisístrata se aplicó en una ciudad de Colombia, Pereira, que venía siendo asolada por la violencia de pandillas enfrentadas.
Generación de Igualdad
Este año, el tema del Día Internacional de la Mujer (8 de marzo), “Mujeres líderes: Por un futuro igualitario en el mundo de la Covid-19”, celebra los enormes esfuerzos realizados por mujeres y niñas de todo el mundo a la hora de definir un futuro más igualitario y la recuperación ante la pandemia de Covid-19, y resalta las deficiencias que persisten.
El Día Internacional de la Mujer Trabajadora 2021 es un clamor a favor de la Generación Igualdad, a fin de actuar para conseguir un futuro igualitario para todas y todos. El Foro Generación Igualdad, la reunión más importante para la inversión y la adopción de medidas por la igualdad de género, dará comienzo en Ciudad de México entre el 29 y el 31 de marzo, y se clausurará en París en junio de 2021. Este evento congregará a personas líderes, visionarias y activistas de todo el mundo, de manera segura en una plataforma virtual, a fin de impulsar un cambio transformador y duradero para las generaciones venideras.
