Marcos Bazán es el único acusado. Marcelo Villalba, cuyo ADN fue hallado en el cuerpo de la víctima, dejó de ser juzgado en la segunda audiencia porque una junta médica concluyó que no estaba en condiciones de estar en juicio.
El Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) Nº 7 de Lomas de Zamora dará a conocer este miércoles su veredicto en el juicio por el femicidio de Anahí Benítez, la adolescente de 16 años que en 2016 fue violada y asesinada en la reserva Santa Catalina, de esa localidad.
La lectura del fallo será a las 10.30 y se trasmitirá por videoconferencia a través de la plataforma “Teams“, tal como sucede desde que se reanudó el debate tras un parate de 57 días por la pandemia del coronavirus.
Los únicos que pueden acceder a la sala, aunque respetando el distanciamiento social y el uso de tapabocas, son los jueces Elisa López Moyano, Roberto Conti y Roberto Lugones; el fiscal Hugo Carrión; el abogado del particular damnificado, Guillermo Bernanrd Krizan; la mamá de la víctima, Silvia Pérez; y los abogados defensores Eduardo Soares y Rosario Fernández. El acusado Bazán, 34 años, sigue el juicio por videoconferencia desde la Unidad Nº 9 de La Plata, donde cumple su prisión preventiva.
El debate se inició en febrero con otro imputado en el banquillo de los acusados, Marcelo Sergio Villalba, de 42 años -cuyo ADN fue hallado en el cuerpo de la víctima- pero este hombre dejó de ser juzgado en la segunda audiencia porque una junta médica concluyó que era un “psicótico” que no estaba en condiciones de estar en juicio.
En su alegato de la semana pasada, el fiscal Carrión afirmó que Anahí fue “torturada y cosificada” y pidió para Bazán la pena de prisión perpetua como coautor, o en su defecto partícipe necesario, de los delitos de “privación ilegal de la libertad agravada, homicidio agravado por alevosía, criminis causa y por mediar violencia de género” (femicidio) y como partícipe necesario de un “abuso sexual agravado por acceso carnal”.
Más allá de que ya no estaba siendo juzgado, el fiscal también se refirió a Villalba -quien ya tiene una condena por un abuso en Capital Federal-, como autor de la violación de Anahí y coautor del crimen y recordó que el celular de la víctima se halló en poder de uno de sus hijos.
Bazán es el dueño de la casa donde se cree que Anahí fue retenida, drogada, violada y asesinada. La hipótesis de la fiscalía es que Anahí conocía a Bazán por el interés que ambos tenían por la naturaleza y por sus inclinaciones artísticas y que, en ese contexto, el imputado la secuestró, la retuvo en su casa, la drogó con “burundanga” y ahí fue violada por Villalba. Al ver la búsqueda policial que se desarrollaba por la joven, los acusados “tomaron la decisión de quitarle la vida” para ocultar los delitos que habían cometido.
La defensa de Bazán, a cargo de los abogas de la Asociación Gremial de Abogados Rosario Fernández y Eduardo Soares insistieron con la inocencia del hombre y afirmaron que con este juicio “se protege a la policía”. Sostienen que en el femicidio está vinculado Damián Lozano, entonces jefe del distrito Lomas de Zamora Norte de la Bonaerense, quien fue detenido cuatro meses despúes del crimen tras la investigación por narcotráfico y trata que operaba en el barrio Parque Barón, donde vivía Anahí.
Anahí fue vista por última vez el 29 de julio de 2017 cuando salió de su casa de Parque Barón, en Lomas de Zamora, para dar un paseo y el 4 de agosto su cadáver fue encontrado desnudo, con lesiones cortantes y golpes en la cabeza, enterrado en la Reserva Natural Santa Catalina. La autopsia determinó que fue estrangulada, que le habían suministrado drogas y que en esas condiciones había sido abusada.