Apoyo empresarial al gobierno nacional

0
11

El círculo rojo empresarial validó cada una de las palabras que mencionó hoy el ministro de Economía Luis Caputo durante el almuerzo del Consejo Interamericano de Comercio y Producción (CICyP). 

A la mayoría de los hombres de negocios que dieron presente en el Hotel Hilton de Puerto Madero, unos 310 asistentes referentes de todos los sectores productivos, les gustó la sinceridad y dureza del análisis y la convicción de que el plan no se va a correr de las metas planteadas. 

“Dejó claro que están dispuestos a morir con las botas puestas”, concluyó uno de los asistentes al cierre del evento sobre la decisión de no trasgredir la meta de déficit cero.

El ministro recibió palabras de apoyo antes y después de su presentación. “Es un muy buen puntapié inicial para poner en orden, da la impresión que se está logrando”, sintetizó Eduardo Eurnekian.

No hubo mayores reclamos sino propuestas: “Señor ministro, le pedimos que se armen equipos y mesas de trabajo sectoriales, para tener consolidado, lo antes posible, un programa de competitividad que nos permita abrir la economía”, dijo el anfitrión, Marcos Pereda presidente del Cicyp y vicepresidente de la Sociedad Rural Argentina.

“Esto significa que en el sector empresario habremos de trabajar codo a codo con el gobierno, sector por sector, para coordinar un programa de baja de costos, impuestos y demás trabas, y así alcanzar un grado de competitividad que nos permita crecer mientras nos abrimos al mundo”, expresó Pereda.

El pedido fue tomado sobre el aire por el funcionario nacional quien se comprometió a la convocatoria.

Con las particularidades que atraviesa cada sector, los empresarios aceptaron que el camino del déficit cero es difícil y deja heridos pero advierten que es necesario. Incluso hasta los más dañados como es el sector de la construcción con la obra pública nacional prácticamente parada admitió que es necesario ordenar la macro. Gustavo Weiss, presidente de Comarco reiteró la dificultades que atraviesa el sector con obras frenadas que provocaron unos 100.000 despidos director y otro tanto indirecto, pero advirtió “no sólo somos nosotros los que estamos mal, hay mucha gente, los jubilados por ejemplo. Hay que hacer ajustes sí, pero también hay que tener cuidado sobre quiénes cae”.

Hay coincidencia sobre la necesidad de ordenar la macro y sobre la necesidad de alcanzar gobernabilidad. 

Los hombres de negocios aseguran que el Gobierno debe mantenerse en el rumbo para llegar al año próximo y ganar apoyo en el Congreso para poder Gobernar sin traspiés.

“Es absolutamente necesaria la independencia de poderes, pero necesita mayor apoyo en las Cámaras”, dijo un peso pesado del sector privado.

“Es necesario que Argentina demuestre que el nuevo camino es consistente”, dijo otro empresario acostumbrado a unir lazos con fondos extranjeros. “Hay interés por Argentina, en la agroindustria, la energía, la minería, sin embargo deberá sostenerse en el rumbo para que las inversiones efectivamente vengan al país”, agregó.

Los exportadores, mientras esperan que se modifique el esquema 80/20 (80% de los dólares se ingresan por el Mercado Único Libre de Cambios (MULC) y 20% a través del Contado con Liquidación), también guardan que se mejoren las condiciones para negociar, que se avance con tratados de libre comercio.

También hubo una oportunidad pública de sellar las “pases” con Martín Cabrales, luego del cruce en X (ex Twitter) sobre el precio del café.

Empresarios con Caputo de luna de miel: mucho apoyo y pocos reclamos

El capítulo laboral

Una vez más la necesidad de una reforma laboral sonó como música para los oídos de los empresarios.

En el discurso de bienvenida que pronunció Pereda este capítulo se llevó unos cuantos minutos y cuando lo planteó Caputo como una necesidad recibió los aplausos del auditorio.

“Es necesario hacer una mención especial al capítulo de Reforma Laboral, que el Gobierno pretende llevar adelante, y que fuera bloqueada en la Justicia por la acción de algunos sectores, que se aferran a esquemas de un mundo del trabajo que ya no existe, y que no sólo obturan la creación de nuevas fuentes de empleo, sino que además son una de las causas principales del “Costo Argentino” que atraviesa la vida de todos”, dijo Pereda.

Y siguió: “El sistema laboral, hoy, es un serio problema en la vida de las empresas. Genera juicios que las llevan a la quiebra, altísima desocupación, informalidad, y conflictos absurdos y permanentes entre empleadores y trabajadores”.

Pereda destacó que Argentina lleva más de una década sin crecimiento de empleo formal privado, mientras crece el empleo informal, y el empleo público. “La paradoja del sistema es que, mientras que el empleador no logra muchas veces encontrar mano de obra, en la Argentina hay cada vez más pobres, y la informalidad alcanza el 50 por ciento” dijo y agregó que Argentina tiene 20 puntos porcentuales promedio más de costo laboral que el resto de la región. “Somos el país con la mayor carga de impuestos al trabajo de América. Esto tiene que cambiar para que el país sea viable”.