Pablo Mora y su padre, Alberto, una vez más llevan adelante un valioso trabajo solidario en favor de la Secretaría de Cultura, Turismo, Educación y Juventud del Municipio.
En esta oportunidad, la tarea se centra en el repintado y arreglo exterior del Museo Ferroviario, uno de los íconos más representativos de la historia basavilbasense, espacio que recibe visitantes de toda la región y que constituye un símbolo de identidad para la comunidad.
Más allá del valor del trabajo en sí, se destaca la generosidad de ambos, quienes de manera constante muestran su compromiso con la preservación del patrimonio local y su disposición para colaborar desinteresadamente en cada iniciativa que fortalece la memoria colectiva de Basavilbaso.
