Qué significa que se vislumbre el final de la pandemia por el COVID

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Desde el inicio de la pandemia, la enfermedad COVID-19 ya afectó a más de 608 millones de personas en el mundo y se han registrado más de 6,5 millones de muertes.

En un tiempo récord se desarrollaron vacunas efectivas y seguras que dan alta protección contra el riesgo de complicaciones, y el acceso al esquema primario de dosis fue posible para el 64% de la población hasta el momento. Sólo el 31% recibió dosis de refuerzo. En ese contexto, la Organización Mundial de la Salud considera que ya se vislumbra el final de la pandemia. Sin embargo, esa perspectiva no significa que haya terminado o que termine en pocos días.

“Nunca hemos estado en mejor posición para acabar con la pandemia”, dijo el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus. Pero aclaró que el fin de la pandemia “aún no está ahí”. Se puede ver la línea de llegada, pero advirtió que si el mundo no aprovecha la oportunidad ahora, todavía existe el riesgo de que surjan más variantes del coronavirus y que se produzcan más fallecimientos.

El coronavirus aún se propaga por transmisión comunitaria en el mundo, y la población de muchos países todavía no accedió al beneficio de estar protegida por la vacunación. En Haití, solo el 1,5% de la población tiene el esquema primario. En Yemen, solo el 1,6% y en Congo, el 3%. A nivel mundial, el número de nuevos casos semanales disminuyó un 28% durante la semana del 5 al 11 de septiembre de 2022, en comparación con la semana anterior, con más de 3,1 millones de nuevos casos notificados. Si bien el número de muertes semanales disminuyó en un 22% en comparación con la semana anterior; se produjeron más de 11.000 fallecimientos en la última semana reportada.

El director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, señaló que las autoridades sanitarias deben adoptar medidas para el fin de la pandemia/ REUTERS/Denis Balibouse
El director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, señaló que las autoridades sanitarias deben adoptar medidas para el fin de la pandemia/ REUTERS/Denis Balibouse

El último domingo, el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, afirmó que “la pandemia ha terminado” al hablar sobre el COVID-19 durante una entrevista que se emitió en el programa “60 Minutes” de la CBS. Aunque el mandatario también dijo: “Todavía tenemos un problema con el COVID. Aún estamos trabajando mucho en ello… pero la pandemia ha terminado. Si te fijas, nadie lleva mascarillas. Todo el mundo parece estar en muy buena forma. Y por eso creo que está cambiando”.

Pero lasituación epidemiológica de los Estados Unidos, según el Centro de Recursos del Coronavirus de la Universidad John Hopkins, muestra que hubo más de 2 millones de casos de COVID-19 en el país en los últimos 28 días, y cientos de personas aún mueren cada día a causa de la enfermedad.

La OMS aún no ha declarado el fin de la pandemia. En comparación con un corredor que participa en un maratón, el director de la agencia sanitaria de Naciones Unidas consideró de esta manera a la situación de la emergencia de salud pública: “Podemos ver la línea de meta. Estamos en una posición ganadora. Pero ahora es el peor momento para dejar de correr”. El organismo internacional publicó seis breves informes de política que describen las medidas clave que todos los gobiernos deben tomar ahora para “terminar la carrera” de la pandemia.

El Presidente de los Estados Unidos, Joe Biden afirmó que “la pandemia ha terminado” al hablar sobre el COVID-19 / REUTERS/Emily Elconin/Archivo
El Presidente de los Estados Unidos, Joe Biden afirmó que “la pandemia ha terminado” al hablar sobre el COVID-19 / REUTERS/Emily Elconin/Archivo

“En los Estados Unidos, el gobierno considera que el COVID-19 estaría entrando en la fase endémica. Toma el modelo de la gripe. Pero por el momento la OMS no ha declarado aún el fin de la pandemia. Se considera que hay que aumentar más el nivel de cobertura mundial de vacunación en la población. También hay que observar qué pasa con los sublinajes de Ómicron que son más transmisibles”, dijo a Infobae la médica infectóloga Silvia González Ayala, miembro de la Sociedad Argentina de Infectología y consultora en infectología del Hospital de Niños Sor María Ludovica de La Plata.

Y añadió: “En la Argentina, ya se nota un descenso de casos confirmados de COVID-19 y que no estamos en la situación del año pasado. Aquí la población tiene una inmunidad híbrida: ya muchas personas han tenido la infección y es alta la cobertura de vacunación”.

En los Estados Unidos, hubo más de 2 millones de casos de COVID-19 en los últimos 28 días / REUTERS/Shannon Stapleton
En los Estados Unidos, hubo más de 2 millones de casos de COVID-19 en los últimos 28 días / REUTERS/Shannon Stapleton

Los informes que publicó la agencia sanitaria son un resumen, basado en las pruebas y la experiencia de los últimos 32 meses. Allí se aclara qué es lo que mejor funciona para salvar vidas, proteger los sistemas de salud y evitar trastornos sociales y económicos. “Son un llamamiento urgente a los gobiernos para que examinen detenidamente sus políticas y las refuercen en relación con el COVID-19 y futuros patógenos con potencial pandémico”, explicó el doctor Tedros.

La doctora Maria Van Kerkhove, directora técnica de la OMS para el COVID-19, destacó que el coronavirus sigue “circulando intensamente” por todo el mundo y que la agencia considera que las cifras de casos que se están registrando son una subestimación. En países como la Argentina, desde el 18 de abril, solo se hacen testeos para COVID-19 en grupos priorizados. Por lo cual, si bien los casos confirmados están bajando desde fines de julio en forma consecutiva, se reconoce que no todos los casos de personas que se contagian el virus son notificados.

“Esperamos que se produzcan futuras olas de infección, potencialmente en diferentes momentos en todo el mundo, causadas por diferentes subvariantes de Ómicron o incluso por diferentes variantes de preocupación”, alertó la doctora Van Kerkhove. Se sabe que cuanto más circula el virus, más oportunidades tiene de mutar. Aclaró que esas potenciales escaladas no tienen por qué traducirse en “oleadas o muerte”, ya que ahora existen herramientas eficaces como las vacunas y los antivirales específicos para el COVID-19.

Se espera que al inmunizar a más personas con vacunas y refuerzos y con los fármacos antivirales, las futuras olas del COVID-19 no sean tan dramáticas como las del año pasado/Archivo
Se espera que al inmunizar a más personas con vacunas y refuerzos y con los fármacos antivirales, las futuras olas del COVID-19 no sean tan dramáticas como las del año pasado/Archivo

Como informó Infobae, hay un nuevo sublinaje de la variante Ómicron que está recibiendo más atención hoy: se llama Ómicron BA.4.6 y ya se la ha detectado en muestras de pacientes con COVID-19 en España, Chile, Argentina, Brasil Ecuador, México, Costa Rica, Perú, Israel, Colombia, Austria, Reino Unido y los Estados Unidos, entre otros países.

En diálogo con Infobae, el investigador en virología del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y miembro del Proyecto País, el consorcio de vigilancia genómica del coronavirus del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación, Humberto Debat afirmó que “el sublinaje BA.4.6 sí se está detectando en muestras de pacientes con COVID-19 de más países, incluyendo la Argentina. Si bien aún hay pocos estudios, la mutación R346T podría darle a este sublinaje una ventaja con respecto a otros sublinajes. Pero BA.4.6 no es una aplanadora como otros sublinajes que han generado grandes olas de casos de COVID-19. No se espera un impacto epidemiológico fuerte”.

Los nuevos documentos de la OMS para la última etapa de la pandemia (que están disponibles aquí), el organismo recomendó a las autoridades sanitarias que se vacune a la población incluyendo a las dosis de refuerzo o boosters, especialmente a la mayoría de los grupos de riesgo (como los adultos mayores, el personal de la salud y las personas inmunocomprometidas). También señaló que se debe continuar con los testeos y la secuenciación genómica del coronavirus SARS-CoV-2, e integrar el tratamiento eficaz del COVID-19 en los sistemas de atención primaria. Además, instó a las autoridades sanitarias a no relajarse: deben contar con planes para futuros aumentos de la demanda, incluyendo la obtención de suministros, equipos y personal sanitario adicional.