La investigación por la pornoextorsión que sufrió Ezequiel “Pocho” Lavezzi, , ex figura de la selección nacional, avanza en dos frentes. Por un lado, una fiscalía de instrucción tiene a su cargo la exigencia de dinero para no divulgar material íntimo, 5 mil dólares por cada foto o video. Por el otro, la fiscal Daniela Dupuy del fuero contravencional, cabeza de la Fiscalía Especializada en Delitos y Contravenciones Informáticas, instruye un expediente con tres delitos distintos en su calificación: hostigamiento digital, suplantación de identidad y difusión de imágenes íntimas sin autorización de la víctima, aseguran fuentes del Ministerio Público Fiscal porteño a Infobae.
El delito de la suplantación de identidad es el más sugerente de todos: en el expediente consta que el culpable se hizo pasar por Lavezzi mismo con cuentas de Facebook y hasta llegó a difundir el material.
Lavezzi mismo, por su parte, ya declaró en la fiscalía de Dupuy y dio detalles de lo que sufrió. Fuentes cercanas al jugador afirman que podría saber quién es quien le pidió dinero por su material íntimo: las extorsiones no fueron hechas en comunicaciones a sus perfiles públicos de Facebook e Instagram, sino a dos perfiles privados de uso personal. En la cuenta de Instagram lo sigue, por ejemplo, Lionel Messi.
“Pedimos un informe a Facebook, una vez que tengamos ese reporte vamos a poder dar con la o el culpable”, agregó el fiscal general Juan Bautista Mahiques.
Ese pedido internacional es también clave en otro expediente de pornoextorsión investigado por la Justicia de San Luis, la que asegura haber sufrido la profesora de fitness Gabriela Fernández Aberastaín, que denunció a la ex de su anterior pareja por amenazas y por supuestamente viralizar material erótico. El celular de la acusada fue incautado, el resultado de las pericias se espera para este viernes. La instructora, aseguró ella a Infobae, cree que su presunta victimaria intentó la maniobra al creer que ella había vuelto con su ex. La acusada, por su parte, lo niega.
De vuelta a la causa Lavezzi -el abogado patrocinante es Mauricio D’Alessandro-, no solo se trataría de videos, sino también de conversaciones y las extorsiones llegaron a la pareja de Lavezzi. “Empezaron a escribirle desde dos cuentas de Instagram. No solo a él sino también a su novia, la modelo Natalia Borges, con la que convive. En concreto, estas personas le dicen que tienen sus videos y conversaciones y le dan detalles del contenido, por eso se le da verosimilitud. Aunque si fueran falsos sería una extorsión de todas formas”, explican fuentes cercanas al caso.
No es la primera vez que material íntimo del futbolista sale a la luz: en agosto de 2014, una serie de fotos de claro contenido sexual del ex San Lorenzo y Napoli junto a su entonces pareja, Yanina Screpante, circularon por Twitter y Facebook poco después del Mundial de Brasil. Lavezzi aparecía con una gorra de policía de cotillón.